14.9.17

Nuevo caso de la inspectora Gutiérrez: "La mafia blanca"


En la anterior entrada, escrita hace demasiado tiempo, os hablaba de que ya andaba por ahí el germen de la séptima de mis novelas que tiene como protagonista a la inspectora Susana Gutiérrez (en realidad entonces llevaba ya casi un mes "peleándome" con ella) y aquí la tenéis, calentita. La he titulado La mafia blanca; voy a explicar, sin destripar la historia, el porqué de este título.

Yo nací en una maternidad que se llamaba "La Casa de la Madre". El edificio aún existe, pero desde hace treinta años (o más) es una residencia de ancianos que pertenece a la Comunidad de Madrid. Se encuentra en la esquina de las calles de Goya y del Doctor Esquerdo, en el que fue segundo emplazamiento de la institución; el primero estuvo en la calle de Serrano. 

La Casa de la Madre, regentada por Auxilio Social -es decir, por la Falange- y destinada, por tanto, a mujeres sin recursos, se trasladó de Serrano a Goya en 1959 y desde 1964 admitió también a trabajadoras que se pagaban el llamado Seguro Obligatorio de Enfermedad. Pero bueno, lo importante para nuestra historia es que fue uno de los lugares donde se produjeron casos de "niños robados", durante el franquismo y casi hasta su desaparición, a mediados de los años ochenta. Mientras me documentaba encontré unos artículos que aparecieron en la prensa hacia 1980, donde se hablaba con total desahogo de ese tráfico de bebés, orquestado por monjas, médicos, policías, empleados de los juzgados, a los que se llamaba "mafia blanca". Digo que hablaban con desahogo porque poco menos que daban carácter benéfico a esta mafia, cuya existencia casi justificaban por la incapacidad de la administración competente, por entonces la extinta Diputación Provincial de Madrid, para gestionar de manera eficaz las adopciones legales.

Este es el punto de partida de la historia, donde la dolorosa cuestión de los robos de bebés institucionalizados desempeña su papel. Una novela en la que se las he hecho pasar canutas a la pobre Susana. Espero que me perdone, porque sabe que la quiero mucho, es mi ojito derecho. Como siempre, os reproduzco lo que aparece en la contra del libro para que os hagáis una idea de lo que podréis encontrar en él:

La inspectora Susana Gutiérrez y su compañero, el subinspector Carlos Mena, han de investigar el asesinato de un célebre abogado que representaba a una asociación de niños robados en busca de sus verdaderas madres. Lo que no imaginaba la inspectora Gutiérrez era que la aparente obra de un sicario acabaría por convertirse en algo muy distinto que la afectará personalmente de diferentes maneras y la llevará a una situación límite. ¡Ah! Y hay una boda...
Hoy mismo lo he publicado en Amazon. Aquí tenéis el enlace, por si os interesa.