1.12.11

La buena salud de los mundos virtuales en educación


He asistido esta semana a estas jornadas sobre educación en entornos envolventes que se han celebrado en la UC3M y en las que he hablado sobre nuestro campus en Second Life. Lo que más me ha llamado la atención es la buena salud que tiene el uso de mundos virtuales en educación, la cantidad de iniciativas que hay y la enorme variedad de herramientas -muchas de código abierto- que ya existen para crear e interconectar mundos virtuales.

Quizá lo mejor es empezar por el principio. La Immersive Education Initiative , creada en 2005, pretende combinar gráficos en 3D, tecnología de videojuegos, realidad virtual y medios digitales con cursos en línea y aulas. En ella colaboran universidades, centros de investigación y empresas que buscan elaborar normas, recopilaciones de buenas prácticas, construir plataformas y crear grupos de apoyo. Se puede unir cualquiera libremente, pero hay algunas condiciones muy importantes, por ejemplo, que todo lo que salga de allí habrá de estar libre de propiedad intelectual. De hecho, sólo trabajan con plataformas de código abierto (y, por tanto, Second Life está excluida, aunque sólo desde 2010). Las oficiales son Open Wonderland, Open Cobalt, OpenSim y RealXtend.

En las jornadas hemos visto muchos ejemplos de aplicación de los mundos virtuales a la educación, pero también al trabajo colaborativo, a la resolución de problemas en el aula e incluso para exponer a los niños a los peligros de Internet en un entorno sin riesgo (SimSafety)

Fueron muchas cosas y no es cuestión de citarlas todas aquí, más aún cuando las actas están disponibles en la red. Sí que me gustaría mencionar la iniciativa Internet2 K20 , con la que se pretende asegurar un acceso de calidad a la Red a instituciones educativas y que, aunque nació en Estados Unidos, se ha extendido por el mundo (en España su socia es RedIris).

Se habló asimismo del futuro de los mundos virtuales en este campo y salieron algunas opiniones interesantes. Entre sus puntos fuertes se citaron la simulación de entornos peligrosos sin riesgo, las ventajas psicológicas del uso de avatares, la práctica de habilidades sociales, la colaboración y que pueden ser un aliciente para los alumnos, que ya están acostumbrados a los entornos visuales de este tipo. Pero tambien hay problemas: las exigencias técnicas, no utilizarlo sólo para colgar contenido, que no estén vacíos para no aburrir y, sobre, todo, que si entre nuestros objetivos no está la socialización, es mejor utilizar otro tipo de herramientas.

Termino con mi modesta presentación:



2.11.11

Boni

"¿Pero cómo le voy a llamar 'Boni' en los correos, si es el vicedecano?" pensaba para mí mismo cuando tenía que poner en conocimiento de mis compañeros las horas en las que tendrían que participar en sus clases. Así que muchas veces escribía, muy protocolariamente, "el profesor Martín Galán". Esto fue así hasta que un día coincidí con él en una clase y se presentó a sus alumnos como "Boni". Porque así era, sencillo, accesible, no deseaba rodearse de ese halo místico que parecen tener algunos profesores.

Siempre colaborador, meticuloso; no hace ni dos semanas se puso en contacto conmigo para poder decir a sus alumnos cuándo empezaban las visitas guiadas a la Biblioteca que forman parte de la asignatura en la que colaboramos. Hoy precisamente empiezan esas visitas y lo hacen sin él. De repente y antes de tiempo se ha ido de este mundo. Como he dicho en otras ocasiones, ojalá existiese algo más allá, porque gente como Boni se merecería disfrutarlo. Hasta siempre, compañero.

12.9.11

Tercer "Tweets & Beers UC3M"

Ya llevamos tres ediciones de nuestro "Tweets & Beers UC3M", ideado para que los "tuiteros" varios de la Universidad nos "desvirtualicemos", hablemos de cómo usamos esta herramienta y después sigamos divagando ante unas cañas y unas tapas. Esta vez me tocó a mí, posiblemente al celebrarse el evento en Colmenarejo, y aquí adjunto mi presentación:

Posiblemente sea necesario explicar alguna de las diapositivas "mudas". La tercera muestra lo que yo considero una especie de "bautismo" en un rudimento de red social: un foro de internet dedicado a la música clásica. Fue el primero, porque luego estuve en otros y en uno de ellos cometí el error de hacerme moderador. Mi hartazgo me llevó a "jubilarme" de foros y crear mi primera bitácora (diapositiva 5). Entré en Facebook (diapositiva 6) para encontrar a otros compañeros de mi promoción de la Facultad ya que (¡ay!) pronto haremos las bodas de plata... Creo que el resto no requiere más explicaciones, salvo quizá la número 13, que se corresponde con el día que "vi la luz" en Twitter, el día que mi Atleti se proclamó campeón de la Europa League y la etiqueta #Atleti se convirtió en tendencia mundial...

Ojalá tengamos muchos más "Tweets & Beers" y ojalá sirva para crear un foro de reflexión sobre el uso de las herramientas de la Web social por los diferentes elementos que forman la comunidad universitaria.

1.7.11

¿Second Life u OpenSim?


El último mensaje de esta bitácora pretendía ser una especie de justificación para seguir utilizando Second Life como plataforma para la enseñanza virtual mediante una serie de ejemplos que demostraban (o eso pretendían) que aún mucha gente seguía creyendo en ello. No he cambiado de opinión, pero entretanto he leído una entrada de la bitácora SubQuark en la que se habla de la posibilidad de crear una especie de consorcio educativo basado en OpenSim, que funciona "casi" como Second Life pero es de código abierto y se puede tener alojado en un servidor propio.

En el texto se deja claro que Second Life o, mejor dicho, Linden Labs, está haciendo pocas cosas últimamente para "retener" los muchos proyectos educativos que se habían asentado allí, por ejemplo, eliminando el "grid" para menores de dieciocho años o suprimiendo el descuento del 50% para entidades educativas. ¿Quiere Linden que nos marchemos de allí? Ellos verán, porque tenemos alternativa: OpenSim.

Una alternativa en la que asimismo funciona Sloodle, como se puede ver en la foto que encabeza este texto, hecha en el espacio experimental que he creado para hacer pruebas. Lo cierto es que no es necesario ningún consorcio ni nada parecido, en principio, porque cada cual puede crearse su "grid", con todos los "sims" que desee, en un servidor propio, pero tampoco está mal la idea de construir un "grid" común, por ejemplo a escala universitaria, ya sea local por medio de los consorcios o en toda España, un "grid" en el que cada universidad pudiera incluir sus "sims" y por lo tanto se pudiera ir de un sitio a otro al igual que ahora hacemos en Second Life.

De hecho es lo mismo que se plantea en el texto ya mencionado (recomiendo su lectura), cuyo autor no ve muy claras las ventajas de tener abierto al público en general su propio "sim", aunque sí que considera de gran valor la creación del mencionado consorcio "en el esquema más grande de la educación K-16".

La verdad, cuando empecé a "juguetear" con OpenSim hace unos dos años ya pensé en esto... Tengo claro que mientras no se vean las ventajas de un aprendizaje virtual en un entorno tridimensional será difícil convencer a nadie del valor de esta propuesta, que aún no hemos sido capaces de que en España se realicen proyectos ambiciosos en Second Life, con honrosas excepciones. Pero cuando estas ventajas se aprecien, ¿por qué no crear un "grid" español interuniversitario para aprovechar OpenSim y Sloodle, por ejemplo, para la enseñanza virtual? Enlace

13.5.11

Second Life: ¿Un muerto muy vivo?

Hace no muchos días leí un interesante mensaje en la bitácora de Alain Ochoa "Comunicación + Estrategia = ROI" que llevaba el desafiante título "Muerte a la Web 2.0". No se trataba precisamente de echar pestes sobre las redes sociales y demás, sino de constatar, y cito textualmente, que "nos dejamos deslumbrar por la herramienta y olvidamos su propósito"; cuando una cosa está excesivamente de moda es muy difícil saber si de verdad es útil para algo. Sólo cuando la burbuja estalla se puede trabajar con calma y comprobar qué se puede sacar de estas tecnologías.

Creo que eso es lo que está pasando ahora con Second Life. Tras el tremendo y vertiginoso auge de 2007-2008 vino un igualmente tremendo y vertiginoso declive que llevó a todo el mundo a calificarlo de "bluff", fracaso, etc. Hoy en día se habla muy poco de este entorno virtual fuera de algunos medios, y cuando eso ocurre es sólo para recordar cuán hondo es el precipicio en el que se hundieron las grandes expectativas creadas en su momento.

Y sin embargo hay mucha gente haciendo cosas interesantes allí. Cierto es que ya se experimenta sobre otros mundos virtuales, de código libre e independientes de una sola empresa, pero mucho menos extendidos y "visibles" (y ya sabemos que la "visibilidad" es hoy en día más que una cualidad una obsesión a veces enfermiza).

Veamos algunos ejemplos de lugares que siguen desarrollando actividades muy interesantes dentro de Second Life en nuestro campo:

Infolit iSchool


Es una isla dedicada a la alfabetización en información propiedad de la Universidad de Sheffield, donde se mueve la infatigable Sheila Webber (Sheila Yoshikawa en SL). Funciona desde octubre de 2007 y hasta la fecha sigue organizando eventos, el último este mismo mes relacionado con la conferencia LILAC sobre alfabetización en información en el Reino Unido. Para seguirlos, nada mejor que su calendario.

ALA Island



Tampoco ha dejado de moverse la isla de la American Library Association en Second Life, como podemos ver quienes seguimos su página en Facebook

La isla de la Escuela de Biblioteconomía y Ciencias de la Información de la SJSU


Otro clásico; esta escuela de la San José State University de California es además uno de los pilares de Sloodle, el programa que combina las posibilidades de Moodle con las del entorno virtual envolvente de Second Life. Como es lógico, Sloodle también tiene su propia isla:


Para no alargarme demasiado lo dejo aquí de momento, pero seguiré poniendo ejemplos de que ahora, sin tanto ruido, tanta moda y tanto "máximo experto" (y vuelvo a citar el texto de Alain Ochoa con que empecé esta entrada), se siguen haciendo cosas muy interesantes en Second Life.

25.3.11

Paloma

Un día de finales del verano, allá por 1993, llegué a un pequeño edificio de los que se repiten mucho en el sur de Madrid como institutos de enseñanza secundaria. Allí estaba alojada la Escuela Politécnica Superior de la UC3M. En ese pequeño edificio unos paneles provisionales habían interceptado un cruce de pasillos con acceso a un aula de mediano tamaño. Esa era la biblioteca. A su frente, una chica con aspecto un tanto de "hippie", pelo siempre muy corto, gafas. Fue quien nos recibió y quien me enseñó de qué va esto de las bibliotecas. Sí, ya sé lo de la formación continua, lo del aprendizaje a lo largo de la vida, sí... Pero lo importante es el poso y mi poso lo colocó ella. Desde poner un tejuelo, ordenar fondos, hacer carnés, hasta buscar en una base de datos o los rudimentos de Internet en una época en la que fuera de las redes académicas ni se conocía.

La primera vez que di un curso de formación estuve como un flan. O más bien todo lo contrario. Mi técnica fue quedarme pegado al retroproyector (no había llegado la era del PowerPoint), rígido, mirando a un punto de fuga indeterminado. Todo cambió la primera vez que acompañé a Paloma y la vi dar un curso. Con voz pausada, moviéndose, mirando alternativamente a los alumnos y las transparencias. Desde entonces hice mía esa técnica. Siempre que me pongo delante de unos alumnos para explicarles algo tengo en mente esa sesión reveladora, en aquel pequeño edificio donde cabíamos de milagro, ese día que vi hacer las cosas de una manera que me pareció válida y lo sigue siendo.

Y es solo un ejemplo tangible, pero habría millones. Si algo sé de esta profesión, se lo debo a ella. No quiero lugares comunes ni frases hechas, pero sí que he de decir que es en estas ocasiones cuando a uno le gustaría creer de verdad que no todo se acaba cuando uno se marcha de este mundo, sobre todo cuando hay alguien que se merecería disfrutar de ello. Un beso y hasta siempre.

3.2.11

¿Algo nuevo bajo el sol?


Una "schubertiada"; es decir, un evento convocado dentro del grupo "Admiradores de Schubert"

Tenemos una amiga que es responsable de Secundaria en un colegio de nuestro pueblo. Muchas veces me he ofrecido para ir a hablar a sus alumnos de las redes sociales, por varias razones. Primera, porque es uno de los aspectos de mi trabajo que más me gusta y siempre disfruto hablando de ellas y segunda, y tal vez más importante, porque me duele ver que sea casi siempre la policía la que va a orientarles sobre ellas, como si fuesen sólo un problema de orden público y no una forma de comunicarse.

No quiero decir con esto que no haya que advertir de los peligros que pueden acechar sobre todo a la gente más joven e inmadura. Pero a mí me gustaría plantearles la cuestión de otra manera. Las redes sociales, ¿realmente son algo nuevo?

Lo que ahora conocemos como redes sociales (Facebook, Tuenti...) en realidad no son más que herramientas que permiten gestionar más rápida y eficazmente nuestros contactos sociales. Contactos sociales que, no obstante, son tan viejos como la Humanidad, tan antiguos que se remontan al momento en que los seres humanos empezaron a vivir formando comunidades. Desde que nacemos, estamos inmersos en una red social: primero nuestra familia y poco a poco, a medida que vamos pasando por colegio, instituto, universidad, trabajo, vamos ampliándola con amigos, compañeros de trabajo, etc.

Por tanto, la forma de desenvolverse dentro de una red social mejorada por la tecnología no tiene por qué ser muy diferente a la de nuestra red social "analógica". Si cuando quedamos con los amigos no tenemos la costumbre de bajarnos los pantalones en medio de la calle, tampoco tenemos por qué colgar una foto de esa guisa en Facebook o Tuenti. Si a los amigos no les enseño esa foto romántica y un tanto subidita de tono que me hice con mi pareja en un viaje, si es algo que ha de quedar para la intimidad, pues tampoco tengo por qué airearla dentro de la red social digital.

Y si tampoco me pongo a dar voces en pleno centro de la oficina para dar mi opinión sobre el jefe, difícilmente se puede entender que lo haga en la red social digital. La prudencia es una virtud que tiene el mismo significado en ambos mundos: el analógico y el digital.

Prudencia, siempre prudencia. Con ella dejaremos de lado muchos problemas, pero no todos: sí que se puede señalar una marcada diferencia entre ambas formas de gestionar nuestra red social: la muchas veces enrevesada configuración de la privacidad.

En una charla para adolescentes que usan las redes sociales es donde más hincapié hay que hacer, a mi juicio: desmenuzar la configuración de la privacidad y explicar todas las posibles variantes. Porque si bien tenemos claro que no podemos hacer según qué comentarios de nuestro jefe en medio de la oficina, sí que en una reunión -analógica- de amigotes en la barra de un bar, alejados de nuestro centro de trabajo, despotricamos lo que queremos sin temor a ser escuchados por el interesado. Sin embargo, en una reunión -digital-, si nuestra privacidad no está configurada como debe, lo que escribamos puede llegar a quienes no tenía que llegar. Esto parece de perogrullo, pero creo que hay que darle una importancia capital a la hora de enseñar a gestionar la red social digital.

En fin: casi nada nuevo bajo el sol, con lo que ciertos temores que sigue teniendo mucha gente son bastante infundados si se aplica un mínimo de sentido común. Continuará.